Antecedentes
A finales de abril del presente año se registró en México una de las crisis sanitarias más severas de los últimos años. En un inicio se aseguró que el origen de la epidemia provenía del cerdo por lo que se le denominó Influenza Porcina. Sin embargo, conforme fue avanzando la enfermedad los investigadores descubrieron que se trataba de un virus nuevo. En ese momento la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO, por sus siglas en inglés) hizo un llamado a la comunidad internacional para no categorizar al nuevo virus como influenza porcina, ya que afectaba a un sector importante de la economía; por lo que más tarde se le denominaría virus de Influenza H1N1.
Consecuencias de la información asimétrica
La teoría económica considera a la información asimétrica como una falla de mercado (Robert Pindyck y Daniel Rubinfeld 2005). La información asimétrica o incompleta genera mercados competitivos ineficientes; a su vez origina incertidumbre entre los agentes. Por ejemplo, la influenza H1N1 (antes porcina) puede ser considerada un incentivo para disminuir el consumo de carne de cerdo, por lo que el consumo del puerco disminuye; esta situación afecta a toda la cadena productiva - comercial.
Lo anterior es de suma importancia, sí analizamos el precio real de la carne de cerdo, en un año, éste se incrementó 2.34 pesos por kilogramo (abril 2008-abril 2009); sin embargo a partir del mes de febrero del 2009, el precio del porcino comenzó a descender en un peso por mes hasta el mes de junio, en este mes se registró un precio real del cerdo de 17 pesos por kilogramo, pero se espera que en los próximos meses éste se mantenga constante y tienda a incrementarse hasta llegar a su precio máximo 21 pesos por kilogramo en mes de noviembre.
En conclusión, la influenza porcina afectó de manera negativa el precio del cerdo, más no la influenza H1N1. Lo anterior nos demuestra que la falta de información o información asimétrica es capaz de generar incentivos para disminuir la demanda de un producto, esto puede ocasionar una baja en el precio o viceversa; además, al bajar el precio de un producto, generas desempleo e inestabilidad en la rama económica. Sin embargo el Gobierno tiene la oportunidad de apoyar a los agentes económicos perjudicados e incentivar políticas públicas que beneficien a la sociedad en conjunto. Es importante tomar en cuenta el manejo de la información sobre todo cuando se trata se cadenas económicas de valor.
Por César Dominguez